La vuelta a clases se dará según un indicador de riesgo epidemiológico
El ministro Nicolás Trotta reafirmó la voluntad de un retorno a la presencialidad y habló de construir consensos en el Consejo Federal para establecer un índice objetivo que permita determinar el mejor momento en cada jurisdicción.
El ministro de Educación, Nicolás Trotta, aseguró hoy que las autoridades quieren que vuelvan las clases, aunque advirtió que la decisión la tomarán las jurisdicciones en base a un indicador objetivo de riesgo epidemiológico que se consensuó entre los ministros de la cartera educativa de las provincias.
«Tuvimos (ayer) una reunión con los 24 ministros, donde se presentó un índice de riesgo epidemiológico para proyectar el regreso de las actividades escolares y también algunas propuestas en lo que debe ser la revinculación de los chicos según la realidad de cada jurisdicción», dijo Trotta a Radio Mitre.
El ministro propuso también «que se pueda votar y construir consensos» en la reunión que mantendrá el jueves el Consejo Federal de Educación, que integran los ministros del área de todas las jurisdicciones del país.
«Hubo un consenso en establecer un indicador objetivo que marque y permita dar claridad en la toma de decisión, que es parte de la respuesta importante que tiene que dar el sistema educativo», añadió.
Según explicó, se trata de «un indicador que establece poco riesgo, riesgo intermedio o riesgo alto y tiene distintas variables: una relacionada a los contagios en los últimos 14 días comparados a los 14 días anteriores; qué tipo de circulación hay, si es comunitaria o son casos importados; y el estado de respuesta del sistema sanitario».
«Queremos volver a las clases. Es un proceso complejo donde la decisión final la tiene cada jurisdicción pero que a partir de este índice que estamos construyendo va a permitir facilitar ciertos pasos», resaltó Trotta.
El ministro recordó que «hay 6 provincias que volvieron a actividades escolares pero 3 de ellas tuvieron que retroceder».
En ese sentido, destacó que «la primera que volvió fue San Juan, en agosto, luego de que en julio aprobamos los protocolos para el regreso a clases en un proceso que iniciamos en mayo».
«El índice va a permitir mayor claridad, que va a estar atada a las condiciones para el regreso, ya que es un proceso que puede también tener idas y venidas», advirtió.
En tanto, Trotta aclaró que «no se está discutiendo la vuelta a clases en la Ciudad de Buenos Aires, ya que no están dadas las condiciones».
«Lo que plantea el Gobierno porteño son actividades de revinculación socioeducativas. Lo que se está discutiendo es para actividades que se pueden hacer con riesgo medio; si la Ciudad logra cumplir con ese índice se van a poder desplegar para los 6.500 chicos desvinculados y para los que están terminando el primario y secundario», explicó.
Esta mañana el secretario general de la Unión de Docentes de Buenos Aires (Udocba), Miguel Díaz, aseguró que la vuelta a clases presenciales «no es una decisión pedagógica sino sanitaria».
Por su parte, el secretario general de Suteba, Roberto Baradel, dijo que la vuelta a la presencialidad de las clases se «tiene que discutir responsablemente», remarcó que no puede responder «a una cuestión sectorial» y aseguró que debería comenzar «priorizando los últimos años de la escuela primaria y secundaria».