Ejemplar fallo de la Oficina de Procesos Civiles de Niñez y Adolescencia en San Juan
Resolvió el cambio de tenencia priorizando el proyecto de vida de un adolescente que deseaba mudarse a España
Un reciente fallo del Poder Judicial de San Juan ha marcado un precedente al priorizar el deseo expreso y formado de un adolescente de 14 años de mudarse a vivir con su padre en el extranjero, resolviendo un conflicto familiar complejo y terminando con una disputa por la tenencia.
El caso se centró en un matrimonio separado con dos hijos (por obvias razones no brindaremos datos filiatorios de las partes) donde el padre, residente en España, buscaba establecer un nuevo proyecto de vida que incluía a ambos menores. Pese a los intentos de acuerdo, la madre se opuso firmemente a la radicación de los niños en el exterior, dificultando además todo contacto en los últimos tiempos.
El espíritu de lucha del menor no decayó jamás y fuentes cercanas al expediente indicaron que el adolescente manifestó de manera constante y ferviente su deseo de vivir en España para fortalecer su vínculo paterno y explorar nuevas oportunidades. Sin embargo, este deseo generó una fuerte resistencia en su entorno familiar materno, incluyendo presiones psicológicas que intentaban desalentar su proyecto.
El Gabinete Técnico del Poder Judicial validó el derecho del adolescente a ser oído, concluyendo que las vivencias negativas generadas por la oposición familiar a su proyecto le causaban frustración, inmensa tristeza e incomodidad. La niña, por su parte, no manifestó el mismo interés en mudarse.
La resolución de este caso demuestra un estudio meticuloso y comprometido por parte del fuero de menores. El proceso de investigación y análisis fue llevado adelante por el Dr. Jorge Toro, quien dejó el fallo preparado antes de su licencia, siendo finalmente rubricado por la Dra. Camus. Este procedimiento evidencia en este caso, la capacidad de la justicia para sopesar las presiones externas y validar la voluntad formada del menor.
Ante esta situación, el Juzgado resolvió dos puntos fundamentales:
1. Cambio de Cuidado Personal: Se otorgó el cuidado personal unilateral del hijo varón al progenitor (padre), mientras que la madre retuvo la tenencia de la niña.
2. Autorización de Radicación: Se autorizó la radicación directa del adolescente en España. Inicialmente, se dispuso una estadía temporal durante el receso escolar para evaluar su adaptación, pero en virtud de lo minuciosamente analizado, se optó por la definitiva.
Adicionalmente, la sentencia modificó la obligación alimentaria ya que cada progenitor deberá hacerse cargo del 100% de los gastos del hijo que queda bajo su cuidado, extinguiéndose la obligación de cuota alimentaria anterior.
Este gran fallo subraya la importancia del Interés Superior del Niño y su derecho a formar un proyecto de vida, incluso cuando este entra en conflicto con las expectativas de otros miembros de la familia.
