
Pistolas taser: La policía se prepara para implementar su uso en la provincia
Enrique Delgado dio detalles con respecto a la implementación de estas armas.
Este miércoles, el secretario de Seguridad de la provincia, Enrique Delgado, dio detalles con respecto a la implementación de estas armas.
«Tenemos 40 pistolas y casi la misma cantidad de agentes entrenados, pero seguimos avanzando porque la idea es que todo el personal operativo esté instruido en su uso». Ahora se está capacitando al personas, que estarán autorizados para portar estas armas. Durante el primer semestre de este año queremos que las pistolas Taser estén en la calle.»
Sobre las pistolas Taser:
Un arma de electrochoque es un arma diseñada para incapacitar a una persona o animal mediante descargas eléctricas que imitan las señales nerviosas y confunde a los músculos motores, principalmente brazos y piernas, inmovilizando al objetivo temporalmente. El dispositivo Taser ha recibido fuertes críticas por parte de organizaciones de derechos humanos, así como por el Comité contra la Tortura de la Organización de las Naciones Unidas, que dictaminó que el uso de armas táser provoca un dolor intenso, constituye una forma de tortura, y en algunos casos, puede incluso causar la muerte. El 90 % de las personas que sufren un ataque táser están desarmadas en el momento del ataque.
Los dispositivos TASER se utilizan como paso previo al uso de las armas de fuego. Permiten inmovilizar inmediatamente a un agresor a distancia, sin que éste pierda el conocimiento. Esto, se logra enviando impulsos eléctricos mediante dos sondas a una distancia de hasta 13,7 metros, dependiendo del cartucho utilizado.
Los impulsos poseen muy bajo amperaje (1,2 miliAmperes), a modo de referencia, los disyuntores eléctricos están normalizados para que salten cuando haya una corriente de fuga mayor a 30 miliAmperes. Esto significa que el impulso de los TASER es casi 30 veces inferior al umbral de seguridad de los disyuntores.
Los impulsos son similares a los que utiliza el cerebro para comunicarse con el cuerpo. Al tener dos señales eléctricas similares, el cuerpo no responde a las órdenes del cerebro, inmovilizando al agresor y no permitiéndole mover sus extremidades. A modo de analogía, lo mismo sucede cuando dos radios transmiten en la misma frecuencia, se provoca una interferencia y no podemos oír a ninguna de las dos.