Sánchez fracasa una y otra vez en su política de seguridad
En Casa de Gobierno le cuentan los días, hace meses piensan en su sucesión y mientras tanto se suman los conflictos. Después de un memorándum policial, el secretario de Estado de Seguridad perdió el diálogo con el Jefe de Policía, relación clave para sostener su puesto.
Desde la Policía dicen que las estadísticas del delito bajaron pero esa sensación choca con la realidad. “Es como una fruta que madura en un árbol y luego se cae” dijo un alto jefe policial de Casa de Gobierno a Estación Claridad refiriéndose a la cuenta regresiva que pesa sobre Gustavo Sánchez. El 17 de Junio pasado el Jefe de Policía Eduardo Ramón Lirola emitió un memorándum en el que, de manera amable, dejó saber que “ninguna orden de Sánchez debe acatarse sin antes ser consultada al propio Lirola”.
La política de seguridad de la provincia es pura y exclusiva responsabilidad del secretario de Estado de Seguridad y Orden Público, es quien debe rendirle cuentas al gobernador en cuanto a los sucesos de inseguridad que lejos de mermar, se incrementan de manera alarmante.
Para ello me encargaré de relatarles sucintamente un episodio que mantiene aterrorizados a vecinos de una zona semi rural de la provincia.
Hace aproximadamente dos meses, junto a otras jurisdicciones donde el delito está a la voluntad de los delincuentes, el propio Sánchez se comprometió a estudiar una zona que se convirtió el blanco fácil de robos. La Colonia Rodas en el departamento Rawson.
En aquel territorio a 8 minutos del microcentro de la Ciudad Capital, comenzaron a registrarse un promedio de 3 a 4 hechos delictivos graves por semana. Familias maniatadas asaltadas por ladrones, casas desvalijadas, robo de motos, herramientas de trabajo desde bombas hasta compresores de aire entre otros.
El propio Sánchez se encargó una madrugada de recorrer ese territorio y tuvo el tupé de criticar el hecho de que muchos frentistas no tuvieran sus viviendas cerradas en el frente o debidamente aseguradas con alarmas, boyeros, o muros de altura entre otras medidas de seguridad de alto costo.
La recorrida fue luego de que una familia redujera en el propio patio de su casa al reconocido narco criminal “Zampa” Figueroa. El delincuente había ingresado a la vivienda y tenía listo en la medianera un compresor de aire para robárselo. Figueroa tiene en su haber varias condenas y hoy está alojado en la cárcel de Chimbas.
Tras ese suceso Sánchez prometió la instalación de una garita que el propio intendente de Rawson, Carlos Munisaga, le ofreció pero Sánchez no cumplió. Criticó que el jefe comunal se la diera vacía. Cabe recordar que la obligación de equipar la estructura ofrecida gratuitamente por el intendente es exclusiva responsabilidad y deber del sujeto protagonista de esta nota.
Sánchez solo dispuso la instalación de una Torre de vigilancia policial en calle 7 y Cervantes dónde recientemente delincuentes robaron.
Visión peronista
El hombre está convencido que a la inseguridad se la combate desde la educación porque considera que “el alto nivel delictivo va de la mano con el nivel cultural de la sociedad” por lo que ve con buenos ojos que “los municipios apuesten de manera intensiva a los merenderos como lugar de contención de los sectores más vulnerables”. Última apreciación ligada hoy a un sinfín de investigaciones judiciales en todo el país por la política asistencialista del peronismo derramada en pocas manos en forma de millones de pesos y más vulnerabilidad social y económica y…
Las respuestas demandadas por el propio Jefe de Estado provincial esperan respuestas inmediatas y Sánchez no lo estaría entendiendo como tal.
Las directivas últimas de «primero los papeles y después vamos por el delincuente» tienen bastante ofuscado al gobernador Orrego por procedimientos irracionales que lejos de resolver el acecho delictivo ralentizan las respuestas que espera la sociedad. Tema aparte es la interna feroz entre policías que le responden a Sánchez y policías que le responden a Lirola. En este sentido desde Casa de Gobierno evalúan reemplazar no solo a Sánchez sino también a Lirola porque ninguno de los dos mostró indicios de seriedad.
A ello se le debe sumar el estado calamitoso en el que el gobernador Orrego recibió el parque automotor policial que durante todo el año 2023 no tuvo mantenimiento alguno en la gestión del ex gobernador Sergio Uñac. Hoy eso se refleja en apenas un patrullero por Comisaría por lo que la prevención del delito no es efectiva.
Con este esquema Sánchez no le encuentra la vuelta y no le brinda a Orrego una sola satisfacción en materia de Seguridad Pública. A esta cuentita que cada vez es más difícil saldar, se le suma la áspera relación en la que Sánchez ha entrado con Eduardo Ramón Lirola, Jefe de Policía que hasta su asunción había estado cerca de 12 años inactivo en la fuerza al igual que Sánchez.
Me olvidaba de uno de los primeros traspiés del sujeto. A los meses de haber asumido, por decreto y de manera inconsulta, determinó el aumento del valor que el Policía cobra por servicios adicionales. En Casa de Gobierno cayó pésima la intentona y encima el círculo íntimo de Sánchez le filtró ese decreto a un periodista.
La semana a comenzar espera con manos abiertas a Sánchez quien tiene tan solo puñado de oportunidades para demostrar que tiene gestión. La apuesta es fuerte. El miércoles llegaría la jefa, Karina Milei, ya que está previsto que un día después (este viernes) llegue el presidente de la Nación Javier Milei junto a Sandra Pettovello, jefa de la cartera de Capital Humano.
El pronóstico en cuanto a la continuidad de Sánchez es un Mike Tyson manco, un Messi sin piernas, un Lewis Hamilton no vidente o un merendero repleto de mercadería vencida marca «Cristina»…
