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Bochornosa cena del Círculo de Oficiales de la Policía de San Juan

Los comensales pagaron $35 mil pesos la opción y repudiaron el estado de la comida servida. El año pasado la opción contemplaba entrega de premios los cuales nunca fueron sorteados.

Este sábado el Círculo de Oficiales de la Policía de San Juan intentó agasajar a los socios y no socios pero todo terminó en un verdadero escándalo protagonizado por los organizadores. Lo exitoso del encuentro fue la recaudación. Es que a razón de 35 mil pesos por dos personas (para socios) y 40 mil pesos (no socios) la suma recaudada fue millonaria (asistieron 1200 personas) frente a un servicio que rozó la estafa teniendo en cuenta que se alzaron con poco más de 20 millones de pesos. 

En principio el «festejo» que se iba a desarrollar a partir de las 22 horas terminó por comenzar cerca de la 1 de la madrugada por las inclemencias climáticas. Los asistentes no se quejaron de los shows artísticos (actuó Ale Ceberio) aunque si presentaron graves reparos sobre la comida que incluía una carta con entrada (arrolladito de pollo) un primer plato que consistía en carne asada con papas, postre y a media noche pernil de cerdo. Las quejas radicaron en que la carne vacuna estaba dura, el olor del pernil de cerdo y el postre que consistió en un palito bombón helado que estaba derretido.

En materia de bebidas, la barra de cerveza artesanal no funcionó ya que el elemento de expendio de esa bebida se averió. En la otra barra habilitada quienes requerían por ejemplo un fernet con coca a los mozos, los servidores dijeron que no había hielo. El sábado la jornada fue agobiante tocando el termómetro los 45º grados de calor.

Los responsables del servicio contratado por el Círculo Policial culparon a los cocineros por el estado del pernil al punto de pagarles 18 mil pesos contra los 30 mil pesos que se habían acordado. 

Uno de los mozos que habló con este diario pidio reserva de identidad y confesó que «el pernil de cerdo estaba en bolsas en el piso cerca de los perros que deambulaban en el camping policial habiendo perdido la cadena de frío. Cuando lo servimos los comensales no probaron bocado debido al olor nauseabundo que tenía ese alimento». El mozo agregó además que «los freezer estaban apagados y por eso creemos que el pernil se descompuso. El trabajador aclaró que «nosotros no tuvimos nada que ver con el servicio de gastronomía contratado» al tiempo de comentar que «uno de los cocineros me confesó que la carne había sido cocida tres días antes y recalentada en el momento». 

A la tradicional cena anual asisten funcionarios como el Jefe de Policía y el secretario de Estado de Seguridad y Orden Público, Plana Mayor, retirados y funcionarios policiales en actividad. 

La perlita de la noche se dio cuando terminó la cena y policías hombres y mujeres ingresaron a la cocina para llevarse botellas de bebidas alcohólicas que no pudieron consumir por la falta de hielo como así también se llevaron la comida que estaba en buen estado a modo de cobrarse el servicio no prestado correctamente.  

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