El análisis de la controversial propuesta de ley de renuncia a la paternidad
Esta mañana, la jueza de Familia de San Juan dio su punto de vista desde la legislación y los derechos del niño entorno a la propuesta de la candidata de Milei
La jueza de Familia de Primera Nominación, Marianela López, se pronunció esta mañana sobre la controvertida propuesta de una ley que permitiría a los hombres renunciar a la paternidad, presentada por la candidata Lilia Lemoine, del partido La Libertad Avanza en Buenos Aires. La jueza analizó los fundamentos de esta propuesta en relación con los derechos del niño y las normas internacionales.
La propuesta generó un debate significativo en Argentina, ya que se cuestiona su constitucionalidad. La jueza López explicó que los derechos y responsabilidades parentales están consagrados tanto en el código civil y comercial argentino como en la Convención de los Derechos del Niño: «Tanto la mamá como el papá tiene la obligación de cuidar a sus hijos, alimentarlos, darles saludos, vivienda, recreación, hasta darle su apellido. Todo está contemplado en la Convención de los Derechos del Niño que tiene jerarquía constitucional» defendiendo los derechos del menor.
La jueza aclaró que los derechos del niño están garantizados desde su nacimiento y no deben ser objeto de debate, ya que están respaldados por tratados internacionales y tienen un lugar de importancia en la Constitución Nacional: «si contemplamos todas las normas que tiene nuestro país que responden a Tratados Internacionales y con jerarquía constitucional, está muy cuestionado». Por lo tanto, la propuesta de ley de renuncia a la paternidad plantea dudas sobre su compatibilidad con los derechos de los niños.
La magistrada también destacó que el debate sobre la renuncia a la paternidad y el debate sobre el aborto son cuestiones diferentes, ya que los derechos del niño están consagrados en las leyes y tratados internacionales y no requieren un nuevo marco legal. López concluyó afirmando que no es necesario debatir cuestiones relacionadas con el reconocimiento de los derechos humanos: «hay debates que no hay que darlos. Los reconocimientos como humanos creo que no se merecen el debate porque ya están garantizados por todos» concluyó.