Economía: El costo fiscal de las medidas supera los $ 700.000 millones
El impacto en las cuentas públicas depende de la inflación
Las medidas económicas recientemente anunciadas por el Gobierno nacional para aliviar el impacto inflacionario en los ingresos de trabajadores, jubilados y beneficiarios de planes sociales, se traducirán en un desembolso fiscal de $729.000 millones, representando el 0,5% del Producto Interno Bruto (PBI). A pesar de que este gasto extra podría aumentar la presión fiscal, en pos de alcanzar el objetivo de déficit primario del 1,9% estipulado por el nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el aumento inflacionario actúa como un aliado para el Gobierno en esta situación.
De acuerdo con un análisis realizado a cabo por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), se prevé que al final del proceso, la inflación podría mitigar el impacto de este gasto, teniendo un efecto limitado en las finanzas públicas. El IARAF señaló que, considerando la reciente devaluación del peso y si la inflación mantuviera su proyección previa, el gasto aumentaría un 0,3% en relación al Producto Interno Bruto (PIB) durante el segundo semestre, únicamente tomando en cuenta el gasto incremental correspondiente. .
En este sentido, el Instituto explicó que este incremento llevaría el gasto del 12% al 12,3% del PIB. En caso de que la inflación aumente hasta un 154% anual tras la reciente devaluación del peso, el gasto en relación al Producto Interno Bruto (PIB) se mantendría en un 12% durante el segundo semestre. Esta cifra no mostraría variaciones en comparación con el escenario sin las medidas implementadas, según conclusiones del análisis.
La estimación del FMI para 2023 habla de una inflación de 120%, pero el consenso de los analistas entiende que estará más cerca del 150%. En consecuencia, el paquete de medidas no tendrá impacto directo en lo que respecta a lo acordado con el organismo y del cual depende un nuevo desembolso de US$ 2.700 millones en noviembre.
Además, hay un aspecto negativo a considerar. Cuando la moneda pierde valor, esto afecta a las personas que deberían estar beneficiándose de estas medidas. Con el agravante de que, en algunos casos, superado los meses en que se recibe la ayuda, los ingresos vuelven a aplanarse.