El 60% de las denuncias por violencia familiar son de departamentos alejados
Desde la Dirección de la Mujer confirmaron que solo el 40% de las denuncias registradas corresponde a los 5 departamentos del Gran San Juan, el porcentaje restante corresponde al resto de la provincia.
En comunicación con Claridad en las Noticias -Primera Edición-, la titular de la Dirección de la Mujer, Adriana Ginestar, confirmó que el rol de los Juzgados de Paz ha sido muy importante en los departamentos alejados, donde se ha registrado un mayor incremento de denuncias.
«Los departamentos alejados han experimentado en todo este tiempo aumento de pedido de ayuda y denuncias. Esto tiene que ver con muchos factores, fundamentalmente el trabajo que hacen las Áreas de Mujer municipales que no solo actúan en los pedidos de ayuda, sino que se interviene en la asistencia, asesoramiento y realizan tareas de promoción y prevención. Esto hace que las mujeres de los departamentos conozcan los recursos institucionales y comienzan a acercarse al mismo», destacó Ginestar.
Desde enero hasta octubre del corriente año, según las estadísticas de la Dirección de la Mujer, se han registrado cerca de 6.000 pedidos de ayuda. Del total, solo el 40% corresponde a los departamentos del Gran San Juan. «Cuando hablamos del Gran San Juan hablamos de los cinco departamentos que lo integran, pero hay departamentos como Pocito o Caucete, que sin ser considerados del Gran San Juan, nos sorprende la cantidad de números. Caucete está en el cuarto lugar a nivel provincial, y lo sigue Pocito. Las proporciones cambian en razón de estos departamentos con alta densidad poblacional», sentenció Ginestar.
«El rol de los Juzgados de Paz es muy importante, porque tienen competencia para intervenir en el listado de medidas cautelares. En la actualidad, muchos de estos Juzgados de Paz tienen recambio generación e influye en el compromiso de las juezas y jueces de paz en estos lugares. Cualquier mujer tiene el recurso de ir al área de mujer municipal para asesorarse. También pueden ir a los Juzgados de Paz y acudir a las comisarias jurisdiccionales. Muchas veces lo que ocurre en los departamentos alejados es que las mujeres no se animan a ir a las comisarías porque los agresores son conocidos en el lugar y la comisaria genera desconfianza. Hay que decir que las comisarias han comenzado a cambiar en este aspecto», finalizó Adriana Ginestar.
