San Juan

EXCLUSIVO: en menos de 48 horas la Justicia le quitó dos hijos menores a una pareja

Ariel Olmos y Cintia Agüero tienen una beba de 3 meses y un menor de 3 años. Una orden judicial de la jueza de Familia Estela Tejada consideró que los menores deben estar al resguardo de una residencia estatal.

“Vinimos a hacerle una sesión de kinesiología a mi bebe de 3 meses y por una denuncia del Hospital Rawson me sacaron a mi niño” dijo Ariel a Estación Claridad. La pareja de escasos recursos y que según la Justicia, los monitorean desde hace tiempo, dialogó con este diario.

“Los venimos monitoreando desde que tu primer bebé tenía 10 días y los encontramos en Chimbas durmiendo en una carpa y desde ese entonces no cambió nada” dijo a la pareja una trabajadora social en los patios del Hospital Rawson.

Las alarmas se encendieron nuevamente cuando profesionales de la salud advirtieron a ambos pasar la noche del jueves a la intemperie. “Era para no esperar tanto por la tercera de dos sesiones de kinesiología para mi beba” dijo el hombre. Mientras ello ocurría se acercaron a la pareja una trabajadora social de Trabajo Social del nosocomio público, dos asistentes y dos efectivos policiales del cuerpo especial de Rescate de Personas de la Policía de San Juan.

En ese momento la policía de la división especial le requirió a la madre de la beba los controles médicos y no supo responder su progenitora por los controles que no hizo para el tercer mes de edad de la menor.  A la beba se la terminaron llevando a una residencia estatal para estar bajo cuidado de especialistas.

El caso conmocionó a la opinión pública por el estado de vulnerabilidad de los jóvenes padres que vivieron en Chimbas, Albardón y actualmente residen en Caucete ocupando una precaria casilla de adobe en una finca que no registra actividad. “Firmé como un contrato que me permite quedarme hasta que se venda la finca” dijo el hombre a Estación Claridad. Ariel admitió en el Móvil de Exteriores de la radio que viven en la “pobreza” aunque afirmó que “tenemos leche para nuestros hijos”.

Ella sin trabajo y él temporalmente empleado en el mundo de la informalidad laboral del campo sanjuanino, dijo a Estación Claridad que su esposa “gameleó embarazada” y que por el tamaño de la panza a los 7 meses “solo ponía la gamela a la mitad”.

Ahora la pareja deberá explicar nuevamente en la Justicia porqué ponía en riesgo la vida de sus dos hijos. El proceso lleva tiempo y ambos tutores tienen 90 días para modificar rotundamente los medios lícitos para asegurarle a los menores una crianza sin riesgo alguno.

Pero esos 90 días pueden ser prorrogados por 90 días más y si la Justicia dispone en virtud de las carencias de la pareja, los menores podrían ser dados en adopción.    

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