Ecuador: sigue la tensión y ya son 5 los muertos en los enfrentamientos
Las protestas dejaron en su primera semana cinco muertos, cientos de heridos, además de una decena de policías en manos de los manifestantes.
La principal organización indígena de Ecuador dio la espalda al diálogo propuesto por el Gobierno para resolver la violenta crisis por el plan de ajuste negociado con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que dejó en su primera semana cinco muertos, cientos de heridos y 766 detenidos en las protestas.
Jaime Vargas, dirigente indígena llamó a “radicalizar las acciones” mediante “bloqueos de vías y tomas” de edificios públicos, habló también frente a los indígenas que se concentran en un coliseo de Quito. “¡Vamos a radicalizar con más fuerza, compañeros, y si me tienen que denunciar y si tienen que matarme, que me maten!”, exclamó el dirigente.
El dirigente lanzó un balde de agua fría a la expectativa abierta por el presidente Lenín Moreno sobre un posible arreglo con mediación de la Iglesia y Naciones Unidas.
Ecuador quedó enfrentado a una nueva escalada de la crisis tras una semana de violentas manifestaciones, que además de dejar víctimas sumieron en el caos a Quito e interrumpieron el transporte de crudo por el principal ducto del país.
El secretario general de la Presidencia, José Briones, habló apenas de dos muertos y denunció el secuestro de uniformados. Aun así “reiteramos nuestra disposición al diálogo siempre en el marco de la paz”, dijo.
Los pueblos originarios encarnan el descontento social por las reformas económicas que impulsa Moreno en el marco de un programa de millonarios créditos destinados, según él, a salvar de la “debacle” a la dolarizada economía ecuatoriana tras años de “derroche, endeudamiento y corrupción” en el Gobierno de su antecesor y exaliado, Rafael Correa. Entre los ajustes está la eliminación de los subsidios al diésel y la gasolina, lo que disparó las tarifas hasta en un 123%.