El representante de APLA sostuvo que «el acuerdo de mejora de los haberes es suficientemente importante como para garantizar la normalidad de los vuelos», por lo que se decidió suspender la huelga.

Estos dos gremios habían anunciado la semana pasada un paro de 48 horas para el fin de semana porque entre septiembre de 2018 y el mismo mes de 2019 habían recibido un incremento salarial del 22% contra una inflación que promedió el 55%.

Pero mediaciones de último momento del Gobierno nacional a través del ministerio de Trabajo y Producción se iniciaron negociaciones que permitieron llegar a este acuerdo salarial parcial que asegurará los vuelos al menos hasta el 31 de diciembre.

El conflicto había escalado a tal punto que la secretaría de Trabajo había dictado una tercera conciliación obligatoria que los pilotos estaban dispuestos a no acatarla si antes no había una propuesta salarial.